La muestra tomada por una vecina de la zona de 24 y 495, según el estudio bacteriológico realizado determino presencia de dicha bacteria en el agua, lo que determino que no sea potable para consumo humano.
Según informo la frentista que tomo la muestra de la misma red y no del tanque interior de su casa “cada tanto tiempo mandamos hacer estudios porque sentimos olores o gustos raros en el agua que viene de la red de ABSA y es por una seguridad familiar y del propio barrio.”
Existen muchas cepas de E. coli, y la mayoría resultan inofensivas, sin embargo, existe una variedad peligrosa, la E. coli O157:H7, que produce una poderosa toxina (Shiga) que puede originar graves enfermedades, como el Síndrome Urémico Hemolítico, que puede desencadenar un fallo renal, explican los los expertos en la materia.
No es la primera vez que suceden este tipo de situaciones en la red domiciliaria.